La extremo Kelsey Arroyo se reincorporó a los entrenamientos del Deportivo Saprissa, luego de recuperarse de un esguince grado uno del ligamento colateral medial de la rodilla izquierda y otro esguince grado uno del tobillo izquierdo, esto tras su debut contra Morpho FC en el Torneo de Copa.
La Morada estuvo dos semanas fuera de los terrenos de juego, la primera en una etapa clínica y la segunda realizó trabajo diferenciado de readaptación física. El martes anterior se incorporó de lleno con el grupo y ya se encuentra completamente habilitada para jugar contra Dimas Escazú el próximo miércoles, si el cuerpo técnico así lo decide.
“Muy contenta, con muy buenas sensaciones. Llegue a Saprissa muy feliz, con ganas de hacer las cosas bien; el primer partido contra Morpho FC siento que trabajé bien, sin embargo, tuve una lesión fortuita. Gracias a Dios y al trabajo de la parte médica del club, ya pude reincorporarme otra vez al grupo y trabajar de lleno”, afirmó la jugadora que llegó como uno de los nuevos refuerzos de la institución.
Arroyo catalogó como importante su regreso, ya que al poder entrenar de lleno con el grupo podrá adaptarse a la idea del entrenador Adal Sánchez. “Estoy lista para cualquier oportunidad y así aportarle al equipo”, añadió.
Kelsey, al igual que el resto del equipo, piensa en el juego de vuelta de la serie contra Dimas Escazú. En el primer encuentro, las Moradas se llevaron la victoria por marcador de 3-1 y ahora buscarán sellar la serie en el Ricardo Saprissa.
La Morada afirmó que su adaptación con el grupo “ha sido muy buena” y explicó que el equipo se encuentra fuerte.
“Los entrenamientos y la parte competitiva muestran a un grupo muy unido y fuerte. También la adaptación ha sido rápida, porque el plantel ha sido sumamente receptivo. Estoy enfocada en ganarme un puesto, pero sobre todo sumarle al club para poder trabajar de la mejor manera como equipo”, concluyó Arroyo.
Las Moradas jugarán contra Dimas Escazú el próximo miércoles 21 de febrero a las 7 p.m. en La Cueva.